• Santiago Cárdenas
  • Modelo con rodilla doblada,S.XX
  • Carboncillo /Papel
  • 60 x 43.5 cm
  • icono bandera Colombia

Reseña

Con la obra pictórica y gráfica de Santiago Cárdenas, lo doméstico, lo cotidiano encuentran en el arte un lugar donde rescatar su asombrosa presencia y por ello mismo son elevados a su verdadera dignidad. Esta pintura que toma sus argumentos del Pop Art, mantiene con esa corriente del arte contemporáneo una relación distante y crítica. Al respecto dice Germán Rubiano Caballero: “es innegable su vinculación con el Pop Art”. Sin embargo, como el caso de los mejores artistas, Cárdenas ha logrado expresarse personalmente y cualquier parecido de su obra con otros trabajos, es más bien temático que conceptual. Prueba de lo anterior es la sobriedad y la contención racional de la emoción que al artista le produce el espectáculo de lo cotidiano, alejándose así de las estridencias y efectismos del arte pop. El pintor Juan Antonio Roda dice: “Me parece que la pintura de Santiago Cárdenas es algo insólito en nuestro medio: a la exaltación tropical opone una contención y mesura cartesianas, el pudor y el recato del artista que considera innecesario decir una palabra de más”. Objetos tales como espejos, martillos, ganchos de ropa, cajas de cartón, tableros, jarras etc., son reproducidos con una fidelidad asombrosa siendo su obra la manifestación de un ilusionismo que a pesar de su escrupulosa adhesión a la apariencia del objeto, tiene evidentes connotaciones conceptuales al poner, por ese procedimiento, en cuestión la esencia misma de la realidad visual. Santiago Cárdenas plantea en los siguientes términos su concepción del arte y de la función del artista: “para mí, el objeto del arte en sí no es la cosa perseguida, yo no trato de hacer arte. La pintura es siempre una ilusión a través de la cual el hombre trata de comprender su existencia. Yo pinto para hacerme”.

Jesús Gaviria Catálogo El Arte en Suramericana. 1994.